miércoles, 28 de marzo de 2012

COPLAS A PEDRO ROMERO · CONCHA PIQUER

Con esta se cumple la entrada número 100 de este CANCIONERO TORERO y, como en estos tiempos que corren las efemérides se celebran a bombo y platillo, hemos seleccionado un tema que reúna a lo mejor de cada casa: autores, los imprescindibles Quintero, León y Quiroga;  intérprete, la considerada por muchos como la mejor del género coplero, Concha Piquer; y destinatario del tema, el torero más legendario de cuantos han existido, el rondeño Pedro Romero. Estos son los ingredientes del tema elegido para la celebración de la entrada número 100 en este "archivo interactivo de canciones de toros y toreros", las "Coplas a Pedro Romero", unas bulerías, compuestas en el año 1940, creación de Concha Piquer que, en aquella época de posguerra y radio, ocupaba el puesto más alto del escalafón de cantantes en España. El vídeo está alojado en el canal "villalbafilms".

COPLAS A PEDRO ROMERO
Quintero, León, Quiroga

En medio de la plaza, 
¡olé y olé! ¡tenedme que me caigo!
hay un torero,
que se llama, se llama, 
¡olé y olé! ¡tenedme que me caigo! 
Pedro Romero.
Traje color manzana, ¡y olé!, 
y medias carmesí, ¡que primor!
y unos ojos tan grandes,
¡olé y  olé! ¡tenedme que me caigo!
 que me muero yo.

 Estribillo:
 ¡Ay, Pedro Romero, 
por tu culpa yo me muero, muero! 
Toda Andalucía 
se hace lenguas de tu valentía.
¡Viva la madre que te parió!
 ¡Y viva Ronda, que digo yo! 
¡Ay Pedro Romero, 
por tu culpa yo me muero, muero! 

 Ha citado a la muerte,
 ¡olé y olé! ¡tenedme que me caigo! 
no quiero mirar. 
¡Vaya valor y suerte 
¡olé y olé! ¡tenedme que me caigo!
para torear.
El toro es un juguete, ¡y olé! 
va donde quiere él -¡míralo!- 
y rueda sin puntilla
 -¡olé y olé! ¡tenedme que me caigo!
 por tanto valor. 

 Estribillo.

miércoles, 21 de marzo de 2012

EL RELICARIO · THE CLEVERS

El tema que presentamos hoy es uno de los clásicos del repertorio taurino, "El Relicario", compuesto por José Padilla en el año 1914. Su estreno se produjo en septiembre de ese mismo año en el Teatro "El Dorado", de Barcelona, por la cantante Mary Focela, pero el éxito no le acompañó. Poco tiempo después, en el mismo teatro, fue la turiasonense Raquel Meller, la que lo volvió a interpretar convirtiéndolo en un éxito arrollador que traspasó fronteras y se convirtió en internacional. Pero esa es otra historia que, en su día, ya conté profusamente en la sección "Cancionero" -germen de este CANCIONERO TORERO- del Blog "don Pepe y don José", entrada a la cual remito a los interesados. En el presente espacio será una de las muchas versiones que se han realizado de este tema en todas las épocas y latitudes, una espectacular versión que podríamos catalogar como rareza pues, saltándose el corsé del pasodoble, está interpretada a ritmo de Twist. Se trata de una grabación del año 1963, cuando el rock&roll y sus derivados hacían furor en el mundo entero, a cargo del grupo brasileño "The Clevers". Este era un conjunto que, como en otras muchas otras partes del planeta y al reclamo del triunfo de grupos como "The Ventures" o "The Shadows" en USA, se formó en Brasil en 1962. Estos eran grupos instrumentales cuya característica fundamental era la ausencia de vocalista. El grupo que nos ocupa estaba formando por los siguientes instrumentos: batería, bajo, guitarra, órgano y saxofón. Más adelante, cuando introdujeron un cantante en su formación, pasaron a llamarse "Os Incriveis". El vídeo que enlazamos está alojado en el canal "alfredopessoa13".

jueves, 15 de marzo de 2012

GALLITO · BANDA CRUZ ROJA DE VALENCIA

Fue en Valencia, que en estos días celebra sus festejos falleros, en donde este pasodoble tan torero, Gallito, fue compuesto y estrenado hace 108 años. Su autor fue el maestro Santiago Lope Gonzalo que un año antes, en 1903, había sido nombrado director de la recién fundada "Banda Municipal de Valencia". Pero este pasodoble -junto a otros tres que nacieron al mismo tiempo y que en su momento, al menos dos, tendrán su espacio en este CANCIONERO TORERO- tiene una historia que no voy a ser yo quien la cuente, le cedo los trastos a don Juan Silva Berdús que lo explica así en su libro "Música y Toros: El pasodoble torero".
"De los cuatro pasodobles que compusiera el maestro Santiago Lope Gonzalo para la corrida de la Asociación de la Prensa de Valencia del año 1904, el de mayor popularidad alcanzada ha sido, sin duda, su inmortal Gallito, considerado por gran número de profesionales de la música y aficionados, paradigma del pasodoble torero. Un pasodoble, Gallito, que no fue dedicado por su autor, contra lo que muchos aficionados pudieran creer y algún crítico taurino ha dejado escrito en la prensa, al mayor de «Los Gallos», al genial Rafael; ni como cabría suponer, a «Joselito», muy niño aún en la fecha en que fue escrito. Lo fue a Fernando Gómez Ortega, hermano de ambos y segundo hijo varón del señor Fernando «El Gallo». Modesto novillero con alternativa tomada en México, no confirmada en Madrid, y que acabaría siendo un eficaz banderillero en las cuadrillas de sus hermanos. Un pasodoble, Gallito, que muy pronto alcanzaría notoria celebridad y renombre, a lo que, sin duda contribuye, aparte la torería de sus alegres y garbosos compases, el hecho de que tan bella partitura estuviese dedicada a uno de los componentes de una de las dinastías más toreras, si no la más, del mundo de los toros, la de «Los Gallos».
¿Cómo fue que el maestro Santiago Lope Gonzalo compusiera y dedicara tan precioso pasodoble al torero menos destacado de la dinastía de «Los Gallos»? ¿Por qué a un novillero de tan escasas glorias toreras? Sucedió que en el año 1904, el 29 de junio, la Asociación de la Prensa de Valencia organizó, para beneficio propio, una novillada tan modesta como modestos eran los cuatro diestros que componían el cartel: Fernando Gómez Ortega «Gallito Chico»; el valenciano, Agustín Dauder Borras y, los sevillanos, Manuel Pérez Gómez «Vito» y Ángel González Mazón «Angelillo». Sus organizadores, a falta de un cartel más atractivo, pretendieron darle mayor esplendor y lucimiento a la novillada en cuestión con el estreno de cuatro pasodobles dedicados a los cuatro novilleros participantes en tan modesto festejo taurino. Tan comprometida como trabajosa labor le fue encomendada al entonces Director de la Banda Municipal de Valencia, el maestro Santiago Lope Gonzalo, quien sumamente inspirado, compuso en pocas fechas las cuatro partituras que le fueron solicitadas, siendo la de Gallito, tras su estreno, la que mayor éxito alcanzara con el transcurrir del tiempo. De la popularidad alcanzada por tan toreras e inmortales partituras, y de la veneración que el pueblo de Valencia sentía por su autor, dan idea los siguientes hechos: Cuatro años después de componer tan toreros pasodobles, el músico riojano de Ezcaray fallecía a la edad de 38 años en el pueblo valenciano de Burjasot, a donde había acudido al reclamo de sus aguas para tratar de aliviar, en lo posible, una grave dolencia estomacal que padecía, y que, a la postre, sería causa de su prematura muerte. Cuando el pueblo de Valencia conoce tan lamentable y funesta noticia, se lanza a la calle para despedirlo y darle su último y postrero adiós, en tanto su querida Banda Municipal de Valencia, sin la experta batuta que la dirigiera durante cinco años, luciendo lazos negros en los uniformes, interpreta la marcha fúnebre de «El ocaso de los dioses», de Richard Wagner. Pero el mucho público congregado no quiso despedir a su querido y admirado músico, en mañana gris y desapacible, con marcha tan patética, y sí, en cambio, quiso darle su postrero adiós escuchando uno de los pasodobles por él compuestos. El elegido, como no podía ser de otro modo, fue su célebre y universal Gallito.
Y puestos a contar curiosidades acerca de tan celebrada partitura, dejemos constancia de un hecho que roza la leyenda y la fantasía. Se cuenta que los admiradores y amigos del llorado maestro Santiago Lope sostenían, y vinieron propagando durante algún tiempo, que los días de corrida en la plaza de toros de Valencia, retirando el marco del cristal que cubría la lápida del panteón donde reposaban los restos del músico, y aplicando el oído contra el mármol, se podía escuchar con claridad, aunque tenuemente, la melodía del famoso pasodoble, y que el fervor popular decía ser interpretada por no se sabía qué raros músicos espirituales. Verídico o no, verdadero o inventado, lo cierto es que este rumor, con más tintes de fantasía que de realidad, ha venido a engrandecer mucho más la fama y popularidad de que goza tan bella partitura, elevándola a la consideración, me atrevería a decir, de mítica y legendaria. Por último, y como curiosidad a tener en cuenta, digamos que las cuatro partituras a que nos hemos referido se estrenaron en la ya mencionada corrida de la Asociación de la Prensa y fueron interpretadas durante el tercio de banderillas por las siguientes Bandas de Música: La de la Beneficencia, la de Veteranos, las de los vecinos pueblos de Catarroja y Torrente, la del Regimiento de Mallorca, y, por supuesto, la Municipal de Valencia, dirigida en tan señalada fecha por el autor de los cuatro pasodobles, el maestro Santiago Lope Gonzalo. El éxito alcanzado fue tal y gustaron tanto las cuatro piezas musicales, que hubieron de repetirse pasados unos días, interpretadas por la última de las Bandas citadas, en un Concierto celebrado en La Glorieta de la capital del Turia."
El vídeo que enlazamos está alojado en el canal de "La Banda de Música de la Cruz Roja Española de Valencia" que son los intérpretes de esta versión del famoso pasodoble Gallito.

miércoles, 7 de marzo de 2012

PIEL DE TORO · RUDY VENTURA Y SU CONJUNTO

Curiosa canción de "Rudy Ventura y su Conjunto" sobre España y la Fiesta de los Toros. El mensaje está muy claro en la escueta letra de la canción que figura a continuación de este párrafo. Jaime Ventura Serra, que era su nombre, había nacido en Canet de Mar, Barcelona, en 1926. Su época de mayor popularidad, en los años sesenta, coincidió con la llegada de la televisión a nuestro país que, en plena madurez de su carrera y unido a la grabación de varios temas que fueron grandes éxitos -como "El Silencio" o "Balada de la Trompeta"- le sirvió de lanzamiento y le convirtió en uno de los artistas más populares de la década. En esta canción, "Piel de toro", su estilo y el de su Conjunto recuerda al de los californianos "Herb Alpert & The Tijuana Brass" que, en esos años, habían creado un estilo propio en aquella zona fronteriza con México mezclando música e instrumentos de ambos lados de la raya. Entre sus éxitos figuraban alguna canción de ambiente taurino, como "The lonely bull", que en su día ya enlazamos en este CANCIONERO TORERO. En los últimos años de su vida, "Rudy Ventura", reverdeció su popularidad como aficionado del "Barça" pues, además de componer el himno de las peñas del club blaugrana, era asidua su presencia, animando con su trompeta, en las gradas del "Camp Nou" y en las de otros campos en los que jugaba su equipo partidos importantes. El vídeo, grabado para TVE en 1966, está alojado en el canal "copilunio".

PIEL DE TORO
Rudy Ventura

España tiene la forma,
la forma de piel de toro,
por eso la Fiesta Brava 
es nuestro mayor tesoro.
Piel de toro, piel de toro,
España, piel de toro.
Piel de toro, piel de toro,
España, piel de toro.